viernes, 1 de junio de 2012

“Pocas mujeres tejen con la técnica del tapiz Wayuu” Imprimir
Lozani Castillo es una de las pocas mujeres del pueblo Wayuu que se dedica a elaborar tapices, técnica de tejido que es destinada a los hombres de su comunidad y, en la que ha incursionado desde los 8 años cuando “el gusanillo de la curiosidad” la atraía por la diversidad de colores.
Elaborar un tapiz es una metáfora de vida para esta tejedora, pues son pocos los que se dedican a tejer tapices y a conservar esta labor ancestral: “A mi me enseñó mi abuelita materna, María Iguarán que vivía cerca de la casa, hasta hace tres años que murió. Ella se esmeraba mucho y, ese gusto por sus creaciones lo heredé” dijo Castillo mientras nos muestra una de sus creaciones multicolores.
Lozani forma parte de un reducido grupo de mujeres que se interesan por los tapices, de hecho dentro de su grupo familiar tan sólo su abuela y ella lo cultivan, porque es una actividad que es transmitida de generación en generación por los hombres de las regiones de Sinamaica, Paraguiapoa y en la Alta Guajira (zona limítrofe), como garantía de preservación de técnicas ancestrales de vida y cultura del pueblo Wayuu.
Para ella el tapiz “es una verdadera obra de arte”, por tal motivo, invita a las mujeres a que se incorporen al tradicional tejido como garantía de su preservación, al aportar un beneficio económico a su comunidad, en el cual invierten cerca de un día dedicado para las creaciones pequeñas y, entre 3 a 4 días  para los de grandes dimensiones.
Su elaboración comienza al colocar en un tambor o aro una loneta que sirve de base para entresacar los hilos multicolores de algodón y/o sintéticos, previamente marcados en el diseño, al final se saca del molde y se cortan las hebras.
El origen de la técnica se remonta a un hermoso mito cosmogónico que vincula este oficio a la pureza de una niña que en el paso del crecimiento hacia la madurez física, recibió de una anciana araña toda su sabiduría en el tejido. Este arte es una estrategia pedagógica evocadora de los mitos originarios y de su representación y supervivencia en el tiempo del pueblo Wayuu.

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